El precio de oro llega a un récord histórico

En un contexto global cargado de incertidumbre, uno de los activos más antiguos y valorados del mundo vuelve a acaparar la atención de los inversores. El oro no solo alcanzó un nuevo máximo histórico, sino que todo indica que su escalada podría continuar. ¿Qué factores están empujando este crecimiento? ¿Y qué pronósticos hacen los gigantes financieros sobre su futuro inmediato? A continuación, exploramos lo que se esconde detrás del nuevo auge dorado.

Un récord que sacude los mercados

El 16 de abril, el oro alcanzó un nuevo hito al superar los 3300 dólares por onza, marcando así su precio más alto de todos los tiempos. Con un avance de más del 25% en lo que va de 2025, el metal reafirma su posición como uno de los refugios favoritos en momentos de volatilidad financiera. En concreto, la cotización llegó a 3333,29 dólares por onza, una cifra que pocos esperaban tan temprano en el año.

El contexto internacional tiene mucho que ver con este fenómeno. Las políticas comerciales impulsadas por Donald Trump —especialmente los aranceles mínimos del 10% a las importaciones— están generando tensiones que repercuten en los mercados. Además, se ha registrado un fuerte incremento en la compra de oro por parte de los bancos centrales, en particular el de China, que continúa acumulando reservas del metal precioso como medida de protección frente a un dólar debilitado.

Un récord que sacude los mercados

El 16 de abril, el oro alcanzó un nuevo hito al superar los 3300 dólares por onza, marcando así su precio más alto de todos los tiempos. Con un avance de más del 25% en lo que va de 2025, el metal reafirma su posición como uno de los refugios favoritos en momentos de volatilidad financiera. En concreto, la cotización llegó a 3333,29 dólares por onza, una cifra que pocos esperaban tan temprano en el año.

El contexto internacional tiene mucho que ver con este fenómeno. Las políticas comerciales impulsadas por Donald Trump —especialmente los aranceles mínimos del 10% a las importaciones— están generando tensiones que repercuten en los mercados. Además, se ha registrado un fuerte incremento en la compra de oro por parte de los bancos centrales, en particular el de China, que continúa acumulando reservas del metal precioso como medida de protección frente a un dólar debilitado.

No es el único gigante financiero que observa este escenario. El banco suizo UBS también revisó al alza sus previsiones y proyecta que el metal llegará a los 3500 dólares por onza para fines de 2025. Sus analistas aseguran que el incremento se debe principalmente a la intensificación de las compras por parte de bancos centrales, que podrían adquirir hasta 1000 toneladas métricas de oro a lo largo del año.

Cómo invertir en oro desde la Argentina

Ante semejante panorama, muchos inversores argentinos se preguntan cómo posicionarse frente a este activo en crecimiento. Según Maximiliano Donzelli, especialista en estrategias de inversión de IOL, existen varias vías para acceder al mercado del oro desde el país:

Oro físico: Es posible adquirir lingotes y monedas a través de entidades bancarias, casas de cambio especializadas o joyerías. Esta opción ofrece la ventaja de tener el metal de forma tangible y personal.

Cedear del ETF GLD: Se trata de una de las formas más accesibles para invertir. El ETF GLD está respaldado por lingotes físicos almacenados en bóvedas, brindando exposición directa al precio del oro sin recurrir a contratos futuros.

Acciones de mineras: A través de CEDEARs locales, se puede invertir en compañías mineras internacionales como Barrick Gold (GOLD) y Harmony Gold Mining Company (HMY), cuyas acciones cotizan en Nueva York.

Paxos Gold (PAXG): Esta alternativa combina el respaldo del oro con la flexibilidad del mundo cripto. Se trata de un token digital vinculado directamente a una onza de oro real, ideal para quienes prefieren operar en el ecosistema de activos digitales.

En resumen, el oro atraviesa una etapa histórica, impulsado por un cóctel de factores económicos, geopolíticos y financieros. Todo indica que su ascenso no se detendrá pronto, y los inversores atentos ya están buscando cómo aprovechar esta nueva fiebre dorada.

**Con información de GIZMODO